Cementerio del Blog



Vaya hombre, requiescat in pace. Así que después de todo, has acabado muerto y más que remuerto. Más frío que el alicatado del Palacio de Hielo de la Bruja de Cornualles. Quién iba a pensar que un sencillo desafío de escribir un poquito cada día en un blog podría llevarte hasta estas funestas circunstancias.

La buena noticia es que no tienes por qué permanecer aquí mucho tiempo (el suelo es un bien escaso en el cementerio de este humilde blog), por lo que toma tus dados y vuelve a lanzarlos para determinar tus nuevos PUNTOS VITALES  y ponerte en marcha de nuevo antes de que regrese el párroco e intente cobrarnos el extra por el servicio de viudas y plañideras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario